Me siento a escribir esta tribuna de opinión 24 horas después de que se hiciera pública la sentencia del caso de los ERE de Andalucía, un tiempo que considero más que prudencial para que las decisiones políticas que exige la ética y el decoro se hubieran producido.
Pero no. Malversar y prevaricar cerca de 700 millones de euros parece que no alcanza el grado de suficiencia para que alguien en el PSOE asuma responsabilidades y se tomen decisiones.
El mayor caso de corrupción de Europa en cuanto a montante económico va a pasar como si no fuera algo de lo que el PSOE de Pedro Sánchez tuviera que hacer acto de contricción y tomar medidas. Fue tan bochornoso escuchar ayer a José Luis Ábalos echando balones fuera y defendiendo lo indefendible que los límites de la vergüenza se han ampliado hasta más allá de lo que la lógica nos dicta.
La corrupción era sistémica en la Junta de Andalucía. Está comprobado y la sentencia lo deja muy claro, las condenas y el alto número de personas condenadas no deja lugar a dudas.
Y por toda reacción el PSOE recurre al “y tú más” contra el PP. Los populares perdieron ayer también una oportunidad de oro de permanecer callados, puesto que la cascada de casos de corrupción de los de Casado, sentenciados ya, es muy larga.
La corrupción es intolerable. Y PP y PSOE, PSOE y PP, la han convertido en poco menos que “esos hilillos de plastilina de los que usted me habla”, parafreseando a Mariano Rajoy, que otra cosa no, pero nos dejó frases gloriosas para la posteridad. En esto no hay diferencias, ni izquierdas ni derechas, ambos la han normalizado y defendido, incapaces de tomar medidas que traigan la decencia y la ética a nuestra política.
Por no hablar del otro gran actor de ayer, Pablo Iglesias, blanqueando al corrupto PSOE. Todo por el sillón de vicepresidente, incluido diferenciar la corrupción del PSOE y al del PP. Pues no, son igual de corruptos y de inmorales, y Podemos acaba de ser su cómplice, como Ciudadanos lo fue del PP.
Es necesaria hoy más que nunca una regeneración auténtica de la vida política española, desde la base hasta la Moncloa. Pero el futuro más cercano es tener a un presidente del Gobierno cuyo partido ha batido récords europeos de corrupción. Bienvenido Pedro Sánchez.
Publicado en Horta Noticias 20/11/19