Opiniones e Ideas de Futuro
CONTIGO, como partido europeísta, convencido de la importancia y de los beneficios para los ciudadanos europeos de la Unión, y de que el siglo XXI en Europa no se puede concebir sin la UE, pacificadora y modernizadora.
Entendemos la Unión Europea como un proyecto inconcluso que requiere de importantes cambios a nivel institucional y organizativo. Opinamos que el concepto de Unión Europea no ha sido definido y acotado correctamente. La Unión es grande y compleja pero a muchos les cuesta responder a la sencilla pregunta de
¿Qué es la Unión Europea? Y muchos otros no encuentran respuesta a ¿Que debería ser la Unión en el futuro?
Pues bien, como Europeístas convencidos, creemos en una Europa fuerte, unida, política, y capaz de afrontar los retos que plantea el mundo en el siglo XXI. Desde CONTIGO somos incapaces de entender la política del nuevo siglo sin una Europa Federal que defienda las ideas de libertad y derechos humanos en sus actuaciones con terceros países a través de una política exterior común. Tampoco compartimos la idea de disponer de fuerzas armadas independientes, en vez de la coordinación y estructuración e un esfuerzo de Defensa europeo y unido.
Objetivos de CONTIGO para la Europa del Futuro
Dentro del planteamiento recogido en varias de las secciones del presente programa abogaremos siempre por una mayor y mejor integración europea. En cualquier caso, y con el ánimo de resaltar las cuestiones que nos parecen más trascendentales, en este apartado nos ha parecido oportuno señalar las que nos parecen más urgentes y necesarias:
1. Es fundamental que se inicie una nueva etapa en las relaciones entre la UE y sus ciudadanos. Debemos potenciar una comunicación permanente entre ambos para que las instituciones europeas puedan explicar a los ciudadanos el trabajo que realizan y los ciudadanos puedan dar su opinión al respecto y marcar los pasos a dar en el futuro.
2. Debemos entre todos buscar la razón de ser de la UE en el siglo XXI. Este siglo trae nuevos retos como el cambio climático, la adaptación a la globalización, la necesidad de acabar con al pobreza en el tercer mundo o la lucha contra el terrorismo. Es imprescindible que los ciudadanos estén informados y entiendan el papel que la UE puede y debe jugar, y el papel fundamental que debe jugar en todas
estas cuestiones. Y es aún más imprescindible que los ciudadanos se involucren en la lucha contra estos problemas. Solo con una Europa unida podremos abordar estos problemas con rigor y con posibilidades de éxito.
3. Abogamos asimismo por el desarrollo de la «infraestructura democrática» de la Unión para lo que se requiere potenciar el papel de los partidos políticos europeos; crear un auténtico «demos» europeo, es decir debates públicos pan-europeos sobre política europea; aumentar las posibilidades de participación ciudadana en las consultas europeas sobre nuevas políticas; y un mejor nivel de información de los ciudadanos sobre la distribución de competencias entre cada nivel de gobierno (europeo, estatal, autonómico, municipal).
Para que esta mejora democrática se produzca, para que la comunicación entre representante y representado en la UE tenga lugar de forma más eficaz, y para convertir a los parlamentarios europeos en auténticos representantes de al soberanía europea, nos parece fundamental que se establezcan, como primera medida, listas europeas al parlamento europeo. Es absolutamente fundamental que los intereses que se defienden en Bruselas sean aquellos de la Unión y no los intereses de los países miembro tal y como sucede con el sistema de cuotas actual.
4. En la línea de la integración se abogará, asimismo, por una armonización en los sistemas educativos europeos para permitir a los estudiantes europeos cursar sus estudios allí donde les convenga. Es fundamental romper las fronteras educativas de la Unión.
5. Se apoyarán todos los esfuerzos por completar el mercado único y apoyaremos los esfuerzos para que Europa se convierta en una economía dinámica, con la estrategia para el Crecimiento y el Empleo, haciendo hincapié en la promoción del espíritu emprendedor, la innovación, la flexibilidad y el aprendizaje a lo largo de la vida, y el equilibrio entre vida laboral y privada.
6. Suscribimos la necesidad de que se plantee una ambiciosa política Exterior y de Seguridad común. En esta línea deseamos que se den las siguientes circunstancias. Primero, el establecimiento de una Política Exterior Común. Incluyendo la constitución de un cuerpo diplomático europeo que dependa directamente del Ejecutivo Comunitario. Esta medida nos permitirá aumentar nuestro peso en el mundo y defender con mayor eficacia las ideas de Europa en el panorama internacional. Segundo, la creación a medio plazo de unas Fuerzas Armadas europeas que sustituyan a las fuerzas armadas nacionales en las labores de defensa de la Unión Europea.
7. Aumentar la movilidad de ciudadanos a través de la Unión. Si realmente deseamos una Unión europea, es necesario que los ciudadanos se acostumbren a visualizar su vida, estudios y carrera profesional en más de un Estado Miembro, es decir que tomen conciencia de que las oportunidades que disfrutan para desarrollarse como personas
ya no están limitadas por las fronteras nacionales, si no que se extienden a casi todo el continente.
8. Cabe indicar que opinamos que salvo ciertas competencias que deben recaer en la administración de la UE, somos unos claros defensores de construir Europa sobre un modelo descentralizado. La diversidad de Europa requiere de mucha flexibilidad y de subsidiariedad – que no es otra cosa que el principio por el cual las decisiones se toman al nivel más próximo posible al ciudadano –. Habrá ocasiones en que ese nivel será el europeo, en otras el nivel nacional, autonómico, o municipal.
No todas las fuerzas políticas opinan lo mismo – algunas entienden la subsidiariedad como un mecanismo para impedir que la UE actúe, y otras la ven como un obstáculo para sus objetivos de una Unión uniformizada. El principio de la subsidiariedad está basado en uno de los principios fundamentales del liberalismo y por tanto CONTIGO se mantendrá firme en su apuesta por que la UE trate únicamente de aquellos asuntos donde la UE aporta un valor añadido. Una Unión que se ocupe de asuntos que mejor se deciden a nivel nacional, autonómico o municipal, perderá rápidamente el apoyo de los ciudadanos.
En este sentido, abogamos asimismo, por desarrollar el papel y la participación legislativa del Comité de las Regiones – institución de gran importancia para las CCAA – complementando el trabajo del Parlamento Europeo, y ejerciendo de enlace directo entre «Bruselas» y la «periferia» europea.
Conclusiones
Desde CONTIGO deseamos construir una Europa unida y fuerte al servicio de sus ciudadanos. Una Europa que represente nuestras ideas en el mundo y que ayuda a consolidar la nación de libertad y la necesidad de paz allí donde ambas escasean. Creemos en una Europa fuerte pero descentralizada y cercana; democrática, educada y dispuesta a afrontar los retos que plantea el siglo XXI. Nosotros sí tenemos una idea de Europa.